20 de julio de 2010

19 de julio de 2010

Cuento de los instantes que precedieron al beso


Había ido esa noche dispuesta a cortar. Empezaría con un “tenemos que hablar”, que es una frase que dice tanto… Es posible que Dios, al ver a Adán y a Eva ocultos tras haber descubierto su pudor, les dijera: “Tenemos que hablar” mientras un Arcángel abría la puerta de salida. Sí. Eso haría. Primero un “tenemos que hablar” y luego un “no eres tú, sino yo”. Lo había imaginado tantas veces: “Es la presión, me asfixio”, le diría. Y él comprendería, pero no del todo. Y lloraría . Y ella le prometería que “jamás quise hacerte daño”. Y él diría que “Demasiado tarde, ¿no?”. Entonces él se pondría de rodillas y le pediría otra oportunidad y ella le diría que tuviera algo de dignidad y que no le montara una escena. Él gritaría que no le importaba lo que pensara el mundo y ella replicaría que “eso es fácil de decir”. Y ella se marcharía y cerraría la puerta para no oír su llanto inconsolable… Sí. Todo eso había imaginado. Pero él, antes de que ella le pudiera decir lo de “Tenemos que hablar”, le dio un beso apasionado delante de la cámara y de millones de felices españoles. Y ella devolvió la conexión
 

Ratas


Stephen Booth, un alumno de 16 años del Colegio Maryhill de Kidsgrove, en Inglaterra, ha pulverizado todos los registros al asistir todos los días a clase durante los pasados 12 años sin faltar ni una sola hora. La Junta Escolar, emocionada y conmovida, ha decidido entregar al bueno de Stephen un cheque regalo de alrededor de 50 euros. Sólo. Un céntimo y medio por cada día.
  
(En la imagen superior, el contable de la Junta Escolar del colegio, mirando a ver si tenía suelto antes de tener que librarle un cheque).
 

18 de julio de 2010

La importancia de llamarse Pato Donald

Zapatero y Rajoy no lo saben porque no hablan inglés, pero pato se dice “duck”.

El pasado 27 de junio, a las seis menos veinticinco de la tarde, en la localidad de Massillon, en Ohio, un hombre golpeó con su coche otro automóvil que estaba parado en el exterior de una pizzería. El conductor dio positivo en la prueba de alcoholemia y en el registro del coche se encontró que estaba en posesión de marihuana. La Policía de Massillon identificó al conductor como Donald N. Duck, un individuo de 51 años residente el 1052 de la Avenida Taggart, y fue trasladado a comisaría. Me solidarizo con él. Un hombre que se llama Donald Duck y que ha conseguido vivir 51 años merece poder fumar marihuana y tajarse hasta las patas de vez en cuando. 

PD: ¿Han comprado el semanario Alba esta semana? Yo lo haría...
 

14 de julio de 2010

El cuento del euromillón


Olegario, el pastor, vio la polvareda a lo lejos y no acertó a saber... Achinó los ojos y unos minutos después la primera de unas treinta furgonetas con antenas satélites en el techo se detuvo junto a él. Un hombre sacó medio cuerpo por la ventanilla. “¡Oiga! ¿Por aquí vamos bien a Rotuerto de Mirarriba?”. Olegario le miró de hito. “Todo recto. Y diga, ¿qué es lo que pasa?”. “Que a uno de allí le han tocado 200 millones de euros en el sorteo de euromillones”. Olegario dejó de masticar la espiga. “Vaya, ¿y a quién?”. El de la televisión engranó primera y gritó mientras se iba: “No sé, pero daremos con él. Sólo hay ocho boletos sellados en el pueblo”.

Olegario aguantó sentado en el mojón a que se fueran. Luego sacó la cartera, quitó la goma, ensalivó el pulgar y fue pasando papeles… La cartilla, el recibo de la óptica, la foto del nieto, el recordatorio de Ana… Tomó uno de los papeles, lo desdobló, miró a su alrededor, llamó a “Blanquita” y le dijo: “Toma. Blanca, que a ti te gusta el papel”. Y la cabra se lo comió y le miró. “No, que no tengo más. Bueno… hay otros siete, pero están en casa”.
 

Canibalismo o la importancia de una buena educación católica...


Un recluso francés de la prisión de Rouen llamado Nicholas Cocaign mató a su compañero de celda a golpes, luego lo abrió en canal y trató de comerse su corazón porque quería “apoderarse de su alma”. Sin embargo, en vez del corazón, los forenses han aclarado que se confundió y se comió parte de un pulmón.

No descarten que Cocaign eligiera Ética en vez de Religión en el instituto y que hiciera novillos en clase de Biología.

En resumen, el caso de Cocaign es un ejemplo perfecto de la importancia de recibir una buena educación católica. 
 

13 de julio de 2010

Si van a Nueva York, vigilen la cabellera


La oficina del Gobernador de Nueva York (Estado), ha decidido aumentar los impuestos por cada cajetilla algo así como un euro y medio (carísimo)… Pero el gobernador, que debe de estar canino, también quiere que la subida afecte a los distribuidores indios (de la “Nación Seneca”, pieles rojas) quienes, en virtud de uno de esos tratados que se firmaban con sangre al pie de un carromato incendiado y acribillado a flechas, no pagan impuestos por la venta de tabaco. El anuncio de que podrían tener que empezar a pagar ha desatado las iras de los seneca que aseguran que la ruptura del tratado sería considerado “un acto de guerra”.

Si este verano van a Nueva York, vigilen la cabellera, protejan a las mujeres y a los niños y en caso de ataque coloquen los taxis en círculo. 
 

El baile del superviviente del Holocausto

La cosa es como sigue: un superviviente del Holocausto, acompañado de su hija y tres de sus nietos, baila (mal que bien) el "I Will Survive" de Gloria Gaynor en varios lugares en los que no creo que nadie haya bailado nunca.

No es que no me atreva, es que me he quedado estupefacto como para poder enjuciar si esta actitud es una falta de respeto o un baile a la vida.

Aunque, la verdad es que... pasado el primer momento de shock, debo reconocer que me gusta ver a ese hombre bailar.

(¡Anda! Lo han quitado de Youtube.
Pues miraré a ver si está en Metacafé... Ah, pues sí que está).


12 de julio de 2010

Mufasa, Simba y las hamburguesas


Mufasa, el león, subió con Simba, el cachorro de león, hasta lo alto de la colina que dominaba el valle. Allí, el rey saludó la salida del Sol y mientras dejaba que la luz bañara las tierras de su reino, contó al pequeño Simba qué era el círculo de la vida: “Todo cuanto ves, hijo mío, está conectado en un delicado equilibrio. El antílope come hierba, nosotros nos comemos al antílope, los humanos acuden al restaurante Il Vinaio en la ciudad de Mesa, en Arizona, en el que se sirven hamburguesas de carne de león mientras dure el Mundial de Sudáfrica, lo que por otra parte es perfectamente legal… y cuando los humanos mueren, se les incinera y sus cenizas son arrojadas a un jardincito y su foto sale en los obituarios de los periódicos locales. Y así, ejem, se completa el círculo… ¿Comprendes, Simba?”.

Simba se miró una garra y dijo: “Pues no”.

Mufasa suspiró y dijo: “Ya. Según lo contaba, a mí también se me hacía raro”. 
 

Te la mereces, Casillas


La siguiente frase no es mía:

"Si alguien en este país se merece a Sara Carbonero, ese es Casillas".

Pero me adhiero.


 

10 de julio de 2010

El Comando Agustín


Durante unos cuantos años, los amigos quedábamos todos los días a la una y media para tomar el aperitivo en el mismo bar. En la barra, detrás de un cristal, en una fuente de barro, yacía un pulpo… que jamás nadie se comió. Al cabo de las semanas, o de los meses, como quiera que nos pareciera que aquel seguia siendo el mismo pulpo, le pusimos nombre: Agustín. Durante los años siguientes, aquel grupo de amigos, rebautizado “Comando Agustín”, elaboró varios planes para el rescate del pulpo y su regreso al mar. Pasamontañas, pistolas, secuestro, alunizajes nocturnos, butrones, asalto con rehenes… Todo lo pensamos y luego nada hicimos porque en el último momento siempre venía alguna lagarta a distraernos. Hoy, ese bar ya no está y no sabemos qué fue de Agustín. Pero sí sabemos que hay otro pulpo que merece la libertad: Paul. A partir de mañana, el Comando Agustín elaborará los planes pertinentes para la liberación del cefalópodo clarividente que nos ha hecho Campeones del Mundo. 
 

5 de julio de 2010

Hoy es mi cumpleaños

Ya sé que la fecha no es la mejor. Incluso diría que el 5 de julio es un día maldito (dos leyes del aborto, ese crimen, tienen que ver). Pero no dejéis de felicitarme. Este año me hace ilusión.

Acepto regalos.
 

1 de julio de 2010

Cuento somalí ( o no)

Yussef se miró en un trozo de espejo roto del retrovisor de un todoterreno abandonado. Por algún motivo que desconocía, pero que siempre le había gustado, Yussef era barbilampiño. A los 15 años, cuando los hijos de sus vecinos se tiraban de sus ridículas barbas, Yussef se pasaba la mano por la quijada y le gustaba sentir que era más parecido a aquellos actores europeos que veía en las películas que traía el camión de Omán cada dos meses. A pesar de esa diferencia, Yussef era un tipo respetado. Incluso querido. Incluso temido. Él fue quien le quitó la pistola al piloto del Black Hawk que cayó en 1993 cuando los demonios yanquis trataron de entrar para matar a los niños. Él fue quien mató al Delta americano que se arrastraba. Él fue quien degolló a Hamil cuando comprobó que no había disparado su AK en la batalla de Mogadiscio. Yussef recordaba todo aquello cuando a 20 metros, Haktun , el salvaje, le llamó a gritos. Yussef dejó el espejo, levantó la cabeza y vio a Haktun que le indicaba con cuatro dedos que le quedaban cuatro días para dejarse crecer la barba que no tenía o moriría en nombre de Alá. 
 

Basurillas


Dos vándalos niñatos dañaron la Cruz de Juan el Bautista en la Catedral inglesa de Blackburn (Lancanshire) y fueron llevados ante un juez de menores quien les reprimió con estas palabras: “Las personas normales os considerarían una absoluta basura”. En ese momento, la secretaria de juzgado protestó ante el juez por su “lenguaje inapropiado”. La madre de uno de los lerdos se sumó a la protesta y así, entre las dos, la secretaria y la madre, han conseguido que el juez sea suspendido indefinidamente por llamar basura a los jovenzuelos. Gracias a Dios, el padre del otro mandril ha manifestado en público que está de acuerdo con el juez y que no ve problema en que se le llame basura “al estúpido de mi hijo”. Así, con el alegre final de saber que todavía queda un padre normal, cierro esta historia.